El desarrollo de la pragmática en los niños

Andrea Rodríguez Martínez. El lenguaje es el sistema a través del cual nos comunicamos y expresamos nuestras ideas y sentimientos, ya sea por medio del habla, la escritura u otros signos convencionales. Según el famoso lingüista suizo Saussure, “el lenguaje, por un lado es lengua pero, por otro también es habla”. Es un sistema de signos, una estructura formal con unas unidades y unas reglas y, a la vez es el uso que se hace de ese sistema fundamentalmente para comunicarse. El lenguaje es la función y uso individual que se hace; por lo tanto, es una actividad y comportamiento individual. Por lo que podemos decir que lengua y habla son dos realidades distintas pero inseparables que van unidas por la interacción que supone una actividad individual y una utilización del sistema. De hecho se puede decir que la interacción es el fundamento principal del desarrollo humano. La Dra. y profesora Libby Kumin, experta mundial en el habla y el lenguaje, en su libro “Habilidades tempranas de comunicación” nos habla sobre las cuatro dimensiones del lenguaje; o lo que es lo mismo, los cuatro aspectos o componentes esenciales para adquirir un correcto y completo desarrollo del mismo: fonología, semántico, morfológico-sintáctico y pragmático. Todos estos aspectos son muy importantes para el desarrollo del lenguaje social y la comunicación del niño con su entorno en el día a día.