Día tras día, los profesionales que trabajamos en la educación no dejamos de sorprendernos de aquello a lo que pueden llegar nuestros alumnos, superando a veces nuestras expectativas. Llegando en ocasiones más allá de donde nosotros pensábamos o podríamos imaginar. Me gustaría relacionar este proceso de trabajo de los alumnos con el nuestro propio, no conformándonos con lo que somos, sino entendiendo nuestro desarrollo profesional como un proceso de mejora y desarrollo continuo y mutuo.

En ciertas ocasiones se tiene la idea de que la labor docente es aquella de transmitir todo el conocimiento que ya tenemos, el cual los alumnos lo absorben como esponjas. Y hoy en día esa labor ha cambiado y ha de ser entendida más bien como un acompañamiento en el proceso de aprendizaje, un hacer conjunto. Un acompañamiento en el que se deja lugar a sus intereses y sin poner límites a sus logros. Una labor de guía de nuestro alumnado con aquello que sabemos. E ir descubriendo a su vez todo aquello que nos queda por aprender, siendo ellos la guía de nuestro aprendizaje. De ellos vamos viendo la necesidad de adquirir cosas nuevas para acompañarlos en ese desarrollo.

A la vez que les enseñamos y ellos/ellas aprenden, tenemos que ir consiguiendo un desarrollo como profesionales que nos ayude a ser competentes en un mundo que cambia, y por lo tanto cambiar las maneras de enseñar.

En definitiva, desde mi punto de vista, entiendo la labor docente como un proceso mutuo de desarrollo, en el que acompañamos a los alumnos en su aprendizaje y nosotros aprendemos de sus lecciones de niños.

Por ello no nos consideremos como aquellas personas que lo saben todo y dejémonos enseñar por nuestros alumnos, o que por lo menos guíen aquellas necesidades de formación continua que tenemos.

Aprendamos juntos y superemos las expectativas para nosotros mismos…

 

 

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Antonio Alberto Fernández
Diplomado en Magisterio, especialidad en Educación Especial. Licenciado en Psicopedagogía y con amplia experiencia en Intervención Educativa en alumnos con discapacidad intelectual.