“Transformar la educación no es una opción, es una responsabilidad”. Con esa sentencia, Daniela Tautiva, psicóloga especializada en neurociencias y neuropsicología clínica, defiende una revolución pedagógica basada en el Diseño Universal del Aprendizaje (DUA): una propuesta que, según ella, “va por delante de la ley”.

En un contexto donde entre el 15% y el 20% de los niños presentan dificultades de aprendizaje —datos que, como apunta Tautiva, equivalen a al menos dos estudiantes por aula—, la necesidad de un enfoque inclusivo se hace urgente. La psicóloga, responsable de formación y coordinadora terapéutica en la Fundación Querer, pone el foco en aquellos niños que, aún sin un diagnóstico clínico, “se esfuerzan, pero no llegan”, y que acaban arrastrando fracaso escolar, frustración y secuelas emocionales.

Tautiva contrasta el modelo tradicional de enseñanza, que parte de un alumno medio ideal —ese que vive en la cúspide de la campana de Gauss—, con el paradigma del DUA. Este último reconoce que la diversidad no es una excepción sino la norma, y plantea estrategias pedagógicas para anticiparse a las distintas formas de aprender, motivarse y expresarse.
“El modelo tradicional apuesta por la igualdad de medios, pero no garantiza la equidad de acceso”, señaló. Con ejemplos tan ilustrativos como permitir a un alumno expresar lo aprendido mediante una canción o un vídeo en lugar de un examen escrito, Tautiva demuestra cómo la flexibilidad educativa no solo es posible, sino esencial para una verdadera inclusión.

El DUA se sustenta en investigaciones neurocientíficas sobre cómo el cerebro aprende. Según explica, este enfoque considera tres grandes redes neuronales: las de reconocimiento (el “qué” del aprendizaje), las estratégicas (el “cómo”) y las afectivas (el “por qué”). Cada una influye en cómo un alumno capta, procesa y comunica el conocimiento. “No hay dos cerebros iguales”, insiste la experta.

Como parte del compromiso con esta transformación educativa, la Fundación Querer, en alianza con la Fundación ONCE y la Universidad Autónoma de Madrid, ha lanzado un curso certificado sobre el DUA. El programa —con microcredenciales para validar competencias— se dirige a docentes, pero también a otros profesionales del entorno escolar. El objetivo es claro: dotarles de herramientas reales y prácticas para garantizar el progreso de todos los alumnos, sin importar sus capacidades o dificultades. “No basta con que el niño esté escolarizado. Hay que asegurarse de que realmente está aprendiendo”, remarca Tautiva.

Entrevista